Novelas gráficas en grapa: Capa y Puñal: Cazador (depredador) y presa

Mediante un coletazo de humanidad el portentoso Ismael me ha obsequiado con el Marco Polo de Alcatena y con Capa y Puñal: Cazador y presa. Como el primer cómic es otra historia vamos a centrarnos en el segundo pues es obra del gran Mantlo, quien, como los Héroes, ha acabado resucitando.

Capa y Puñal: Cazador y presa (Cloak and dagger: Predator and Prey, 1988) se publicó aquí en 1989 dentro de los especiales de primavera tan típicos del primer Forum. Una pena que estas cosas ya no se hagan, parece que si la cosa no lleva numerito no se puede editar en grapa. Lo curioso del caso es que en la portada no pone Capa y Puñal. Como veis estos salen pero pone en grande Marvel Héroes (lo digo por si algún ciego me lee:) y no pone el título de la obra. Ah, el primer Forum, género y figura pero insuperable en su vocación popular y su acercamiento al aficionado. A qué editor actual se le ocurría editar una graphic novel en grapa?


Bueno, al turrón. Capa y Puñal: Cazador y presa, en mi opinión, es una obra floja. Entretiene pero no invita a relecturas porque es demasiado formulaica y superficial. Mantlo suelta aquí su vena justiciera y social pero apenas profundiza o da al relato ese subtexto que hace grandes a sus historias. Evidentemente no ignora el carácter simbólico de los personajes, que creo él, pero no juega con ello. No obstante, por supuesto, tiene sus valores.

El cómic es una historia sencilla donde el demonio que habita la Oscuridad de la que es portal Capa, que se alimenta de Luz, decide enviar el espíritu de Jack el destripador a la Tierra para desestabilizar al héroe primerizo y así manejarlo a su antojo. La motivación es la gula: si pierde el control podré alimentarme indiscriminadamente. Al final, con la ayuda de Puñal, Capa acaba con el acoso del demonio. Como veis es un drama psicológico, la historia que escribía una y otra vez Mantlo con gran acierto demostrando con ello que no hay mejor seguidor de Lee que él.

La historia es rutinaria por lo que no emociona ya que el tema está cantado desde el principio. Por otro lado tampoco hay originalidad o brillantez. Sin embargo tiene el interés de basarse en la duda heroica. La auténtica Edad de Oro de los superhéroes (medida en calidad y no por algo tan estadounidense como es medir en dinero) va de la publicación de Escuadrón Supremo (septiembre de 1985) hasta la publicación de la primera grapa de X-Men vol. 2 (octubre de 1991). Esta época no sólo fue el cenit del mainstream sino también un momento de cambio. Miller y Moore, llevando hasta su extremo el trauma superheroico ideado por Lee y escribiendo en plena crisis del Héroe (en la que aún estamos), dieron paso a lo que llamamos grim&gritty. Un enfoque donde los héroes son gente loca, descontrolada y violenta que deja de salvar a la humanidad para meterse hostias con otros como ellos diferenciados por un burdo maniqueísmo. Pero no sólo el motor del cambio fue la interpretación extrema y trágica de los gigantes. Junto a aquel hay otro que ha pasado desapercibido porque el triunfo, por su calidad y ruido, del primero (de nuevo a los estadounidenses les ciega su veneración por el triunfador) ha opacado todo lo demás. Junto al Superhéroe Loco está el Superhéroe Dubitativo. El posmodernismo entra en el género superheroico y lo transforma.

El tema de Capa y Puñal: Cazador y presa es la duda. Los superhéroes dudan tanto de su derecho a castigar como de su capacidad para distinguir al bueno del malo (si no puedo juzgar no puedo actuar). Además, se empieza a reconocer la eficacia de la policía de tal modo que la pertinencia del superhéroe disminuye. No sólo eso, si no que este duda hasta de si el malo es él. Los grises del posmodernismo invaden el mundo del color plano. Ya no es tan fácil reconocer el Mal porque este no lleva su traje característico. Ya no lleva monóculo, ya no tiene acento extranjero, ya no está loco, ya no es un monstruo. Y en eso se basa el género superheroico. Por eso los disfraces. Los buenos y los malos se disfrazan porque el traje civil es equívoco así que cuando se renuncia a este (o no se escoge bien como el de Capa: capucha y color negro) la estructura maniquea que lo sustenta todo se viene abajo. En el género superheroico los disfraces no ocultan sino que indican la bondad de su portador.  De esta forma Mantlo nos muestra que la duda destroza el heroísmo demostrando con ello que el Héroe lo es porque no cuestiona nada. No sé pregunta si exterminar al enemigo está mal o si destrozar un ecosistema es perjudicial. Así Mantlo trae el posmodernismo a los superhéroes. La humanidad de Lee desarrollada de forma lógica. En esto demuestra el gran guionista su finura. Qué mejor forma de cuestionar con grises al superhéroe que utilizando la pareja blanquinegra, juntos pero no fundidos? -Alguien debería analizar a las parejas superheroicas antitéticas como esta o Halcón y Paloma- En un mundo en que ya no hay claridad, una división tan definida, con una relación no dialéctica sino simbiótica (un paso más del axioma de que los extremos se necesitan), tiene dificultades para existir. Cuando los buenos se disfrazan de malos, cuando los curas tienen motivaciones oscuras, es imposible ser maniqueo.  Esto es lo que hace interesante esta historia. Que termina como debe terminar, la valentía, el sacrificio y la voluntad de proteger se sobrepone a la duda de tal forma que el Superhéroe Dubitativo vuelve a ser el Superhéroe a secas. En el fondo Mantlo hizo trampas, el malvado en este relato lo es sin tapujos. El mundo es gris pero el Mal sigue existiendo. La duda lo engrisece de tal modo que lo camufla con el entorno. El tema está en que el espíritu justiciero de Mantlo no concibe que el Mal sea cuestión de perspectiva.

Junto a esta idea central está el poder simbólico de Capa y Puñal que sin duda es la razón por la que fueron tan populares en su época. Ambos simbolizan el compromiso de los contrarios. En una sociedad dividida por el racismo, Capa y Puñal ejemplifican su superación, en una sociedad devastada por el individualismo mal entendido de la Administración Reagan, Capa y Puñal demuestran que la colaboración no sólo es buena sino que es mejor y que el Hombre es un ser social. El individualismo por su egoísmo lleva al exceso. A Capa a la duda paralizante y a Puñal a la sobredosis de Luz. En ese sentido las parejas superheroicas salvan el individualismo extremo de Juan Palomo (yo me lo guiso yo me lo como) propio del superhéroe salvándole así tanto de su soledad rayana en la sociopatía como de su unilateralidad (que se confunde con fascismo). Por último, en un mundo hiperconsumista, Capa y Puñal predican la moderación. El exceso, ya de Oscuridad, ya de Luz, es malo.

Todo esto dibujado por L. Shoman. Un discípulo de Sienkiewicz mediocre pero con la fluidez necesaria para animar a Mantlo a hacer uno de sus guiones más dinámicos. Así, tenemos viñetas y secuencias mudas y un diálogo menos teatral. De esta manera tenemos un cómic de lectura ligera donde el dibujo puede brillar, no es bueno pero su sencillez es atractiva, de modo que aquel hace honor a su condición de graphic novel. Con ello Mantlo nos demuestra su sabiduría pues se dio cuenta de que había que romper la ley verborreica de Lee, a la que había sido bastante fiel, para empujar al dibujo.

Por tanto, Capa y Puñal: Cazador y presa es un cómic mediocre en el que Mantlo introduce la duda heroica (sin duda de origen Shakespiriano), pero como él sí cree en el Héroe, no como Moore y Miller (en los 80), el grim&gritty acaba conjurado. Los dilemas, las angustias enloquecedoras y el pasado traumático quedan superados dejando el camino libre para el heroísmo, este es el papel del cura en la historia. Con su desaparación se desacraliza la dicotomía de Capa y Puñal (Oscuridad=Mal y Luz=Bien) de modo que ya no hay obstáculos. Así, Mantlo nos lega otra historia, estoy pensando en La Bruja Escarlata y la Visión, de carácter mítico, el conflicto físico contra el monstruo es una alegoría del conflicto interior contra los demonios interiores, con la que hace avanzar a sus personajes. De esta forma Mantlo hizo que Capa y Puñal superasen sus limitaciones para que afrontasen el futuro, una serie regular, con más garantías.

Pervivencias mantlianas: el neutralizador


David H es uno de los más importantes agregados culturales del universo mantliano para el mundo libre. Aún quedan China y esa otra pequeña porción de Europa a la que llaman Rusia. Justo el último lugar en el que pude ver al caballero del espacio, o casi, porque a la conclusión de la saga supersoviética él y latas doradas se acercaban a una isla paradisíaca... Bien, creo que ese fue el último episodio que leí de la serie Transformers y su complemento mantliano antes de que la colección desapareciese de los quioscos. Yo no encontré ninguno más "Bajé y bajé, y en muchos quioscos coruñeses busqué". Existen otros dos números, o eso anunciaban en los correos, quizás acabe dando con ellos algún día, supongo yo que en el interior de las pelusas o entre los rincones del tebeo abusado y de segunda mano, pero la verdad es que preferiría que no hubiese habido ninguno porque ¡así podría montar la nata de mis peores destilados!
Pero os estaba hablando de un blog para lectores que no se chupan el dedo con las cuentas del copyright. Una caverna con buen aspecto dedicada a las pervivencias mantlianas, en concreto, a Rom el Caballero del espacio, donde de vez en cuando su señor David H. recoge con codicia breves escritos de divulgación superheroica que acierta a expurgar de cualquier claro propósito pedagógico. Ni líderes de opinión, ni subgrupos, ni sujetos relegados, un blog en la blogósfera. Poniendo en relieve las confusiones del actual paidocentrismo editorial de la empresa Marvel, que nada espera de sus lectores, reivindicando, en fin, la realidad de una ficción.
No hay mensajes aislables, nada que siendo de hoy o ayer David H. no sea capaz de utilizar para penetrar en los dominios de la regulación y el control industrial si sirve para entregar su mensaje mantliano. Realizar una ilustración con alguno de los muchos personajes creados o guionizados por Bill Mantlo, escribir una carta al correo de una colección, etc. Lo último que ha estudiado nos recuerda la infiltración de los fantasmas en la tierra, que sería largo de contar, y un asunto que no conozco en su totalidad sino meramente en base a la lectura envidiosa de resúmenes de resúmenes argumentales extraídos de aquí y de allá (aunque sobre todo de ahí), la suerte es que debido al Factor DH en su sangre ha tomado uno de aquellos ítems olvidados que encontró en la ficha del
Marvel Universe Handbook dedicada al mutante Forja [link]--> el neutralizador mutante



































¡Otra vez Claremont!

Bueno, bueno, guardaba estas imágenes para un caso de extrema emergencia. Una fantasía aborrecedora pesadilleada tras días de divino aburrimiento, que quiero imaginar imposible: ¿qué ocurriría si llegaran a manos de Monsieur Bendis las crónicas sobre la invasión fantasma a la Tierra en los tiempos del héroe de Galador? Ya tengo a la mitad de la población mundial vuelta un erizo.
No recuerdo haber leído a los compradores del coleccionable de la Patrulla X hablar sobre este pequeño episodio, casi ni para referir el mismo como antecedente de otra saga posterior mucho más famosa sobre la muerte del supergrupo de mutantes. Por un poco de todo eso que es la rabia, la diversión, la tontería o el nerviosismo de encontrar tras de cada huella un rastro intrigante, yo hablo de los sacros misterios de la unión Claremont-Mantlo como quien intenta encontrar en el corazón de un gato de hoy el de otro que estuvo ayer. Así que si tenéis ocasión de sentaros en la rodillas del tío de la navidad en algún festival de la cosa preguntadle por sus colaboraciones con Mantlo en los Micronautas, cómo se repartían argumento y guión, o porqué la aparición de los fantasmas se prolongó por algo más que las tres o cuatro viñetas de otras colecciones. Si además os hacéis con esta otra respuesta os regalo un no-beso []--> "Yo confieso: no conozco a Bonnie Wilford, quien participó junto a Chris Claremont y Bill Mantlo en la creación del argumento para este Marvel Team-up Annual, ¿sería una mujer? Incapaz de confirmarlo, declaro que seguramente fuese muy hermosa (y si no, pues también)."
Esas son las portadejas de nuestra edición española, más grandes, más bestias, y con 32 páginas y las cubiertas finales como páginas de historieta.
Era el año de Forum de 1987 y Arvydas Sabonis estaba a punto de llevarse por delante a todos los pequeños hijos de los USA, nosotros estábamos solo tres años atrás en el tiempo según la edición americana. Aquí muestro la última página del número 36 (X-Men vol.1 nº 185) donde se ve a Forja sosteniendo a Tormenta instantes después del disparo que la desposeyó de sus poderes mutantes. De pie, el agente gubernamental Henry Gyrich, autor del disparo. Y podéis jurar a que esos son los fantasmas, echádle un vistazo a la página robada golpeando la cabeza de algún vecino o conocido contra la pantalla de vuestro ordenador:




Y ahí, el neutralizador de que nos habla David H. El cantante cojo no es otro que Forja, encima de mutante, más apuesto que el mismísimo Tony Stark. Queda por aclarar que la víctima del disparo de Gyrich debía haber sido la terrorista y enemiga del estado Pícara pero... ¿qué se podía esperar de una colección de mutantes?
Queda por avisar a otros posibles fanáticos mantlianos que esta serie de españoleantes números no son mala cosa. ¿Son presa fácil para el mercadeo? Pues mira que ni lo sé, pero vale la pena leerlos aunque no haya más que la emoción, escasamente terrorífica, eso sí, en comparación a la serie de Rom, con la excepción del ataque de los fantasmas a Pícara y los agentes del gobierno en el número 37 (X-Men vol.1 nº 186), jaqueca mental del Profesor X incluida. Dallas está ahí. Forja y su edificio de cristal con un montón de fantasmas de todos los tipos (los sabuesos son mis preferidos), y mutantes en lucha contra una invasión blanda y salada de hechiceros espaciales. Chris Claremont supo hacer algo más que acercar un planeta a la tierra, aprovechó la idea del neutralizador para que la amenaza del pueblo de los espaciales pareciera más inminente. Dotó a un simple objeto con una importancia argumental, alegórica, al hacer que este pasara de mano en mano conjeturando futuras amenazas con unos u otros personajes como protagonistas. Si formaba parte o no del plan editorial o de una colaboración más entre Mantlo y el guionista de los mutantes es algo que desconozco. Lo que ya nadie puede olvidar es que Rom forma parte del universo Marvel.
Y ya se puede poner la ratita del Copyright como se ponga, ¡malvados!



Ya llegaron las imágenes del cameo de Rom y Brillo Estelar en esta saga de fantasmas contra mutantes; son dos páginas, dos viñetitas, solo un truco más del edificio inteligente de Forja; y, pensando en unos improbables lectores de siempre, he preferido recortar la segunda preservando así la emoción del desenlace. Pues eso, una aparición para asustar los fantasmas:





Nota sindical: Ya véis que tenemos una nueva etiqueta para nuestro blog de admiradores; no es la primera vez que sucede que otros blogs o blogueros sirven de inspiración, y podría volver a ocurrir durante los próximos años. Será cuestión de regar el tiesto, dar relleno a la sesera con lo que sea. A espasmos pero interminablemente.