El 9 de Noviembre de 1951 fue un día especial.
Unos 70 años antes un matrimonio italiano viajó hasta Estados Unidos buscando un sitio mejor dónde vivir. Llegaron a Ellis Island, donde se encontraba el control de inmigración que les permitió pasar.
Ese matrimonio tuvo un hijo llamado William Wooruff Mantlo. Mantlo nació y creció en Springfield Tennessee, como un pobre, un granjero mugriento, como un “campesino-propietario” de aquella época, aunque su familia tenía la suerte de poseer la parcela de tierra en la que estaba edificada su casa. William sirvió como alférez en la marina mercante. Mientras estaba destinado en Brooklyn, William conocío a una mujer llamada Nancy Blanche Bruno y el amor pronto floreció. William y Nancy participaban ambos en la II Guerra mundial. Nancy nació y se crió en Sheepshead Bay en Brooklyn, se alistó en la WAVE de la marine estadounidense (una división creada durante la guerra para permitir a las mujeres enrolarse; era un acrónimo de Mujeres (Women) Aceptadas como Voluntarias de Emergencia. Durante la II guerra mundial,
Hacía el final de la guerra con la inminente victoria aliada, la pareja se casó. Como muchos alistados que volvieron a casa se establecieron en Queens Village un barrio de Nueva York cercano a Queens. William trabajaba como empleado de banca y Nancy como secretaria. Los Mantlo tuvieron tres hijos, William Timothy nacío el 9 de noviembre de 1951 en Brooklyn. Los hermanos de Bill, Michael Kenneth and Arthur Robert, nacieron en 1954 y 1956 respectivamente.
La vida de Bill es una de tantas vidas, alegre a veces y triste otras. Durante su vida, sería rehén en un atraco, salvaría a su hermano Mike de ser secuestrado, detuvo un autobús lleno de ancianos (no iba muy deprisa, aun así Tony Isabella lo recuerda como algo extraordinario) que avanzaba por un parque sin conductor el día de su boda con Karen Pocock, se hizo cargo del hijo de su esposa, Adam, tuvo con Karen una hija a la que llamaron Corinna, se divorció aunque Karen fue para siempre el amor de su vida, se hizo abogado defensor ayudando a mucha gente por el camino y sería atropellado por un conductor que se dió a la fuga, dejándole, hasta el día de hoy, discapacitado en una institución especializada.
Ah sí: Bill Mantlo también escribió la más maravillosa, sorprendente y espectacular montaña de cómics que jamás nadie haya escrito en poco más de una década.
Ese 9 de Noviembre de 1951, Charles M. Schulz publicó en periódicos de Estados Unidos, como hacía desde algo más de un año, esta tira , bajo el nombre genérico: Peanuts.